Zambia: Las mujeres buscan adquirir la propiedad de la tierra
Por Dorothy Chisi
El empoderamiento de la tierra para las mujeres es fundamental en el incremento del desarrollo a nivel comunitario y nacional.
La imagen puede no parecer tan alentadora en Zambia respecto a las mujeres que intentan avanzar en el acceso a la tierra.
E incluso las pocas mujeres que tienen acceso a la tierra la están utilizando a su máxima capacidad.
Una de esas mujeres es Tamara Kaunda, una graduada de 27 años, que es un brillante ejemplo de mujeres en liderazgo que pueden inspirar a otras
Dr. Kaunda tiene un terreno de 26 hectáreas en la zona de Silverest, en las afueras de Lusaka, donde cultiva tomates y verduras.
La joven líder ha empleado a ocho jóvenes para empoderarlas en la granja en la producción de tomate.
El Dr. Kaunda dijo que los agricultores que compran semillas de su compañía, son pilotados por un equipo de expertos para como cultivar sus cosechas participando en la agricultura. Señaló también que la agricultura era lucrativa y que proporciona enormes ganancias, que la gente nunca podría imaginar hasta que lo intenta.
El Dr. Kaunda dijo además que si se les da la oportunidad de acceder a su propia tierra, las mujeres pueden hacer más, al igual que los hombres, cuando son propietarias de la tierra.
Esas personas comprueban que realmente las mujeres pueden ser una gran ventaja cuando poseen la tierra.
El derecho de las mujeres a la tierra y a otros recursos naturales se ve debilitado, porque se las considera inferiores en sus respectivos hogares y comunidades.
Esta percepción se ve reforzada por leyes tradicionales y legales que son discriminatorias.
Según la Agencia Sueca de Cooperación Internacional para el Desarrollo (ASDI), el acceso de las mujeres a la tierra y la propiedad, por ejemplo, es fundamental para el empoderamiento económico de las mujeres, ya que la tierra puede servir como base para la producción de alimentos y la generación de ingresos.
A pesar de que la propiedad de la tierra es el recurso más importante para la mayoría de las mujeres rurales, casi todas ellas están limitadas en términos de acceso a la propiedad y control de la tierra, y los ingresos producidos, lo que les evita tener roles de liderazgo.
Siendo una sociedad patriarcal, las mujeres del lugar se enfrentan a muchos desafíos relacionados con los derechos a la tierra.
Esto ha hecho que sea muy difícil para las mujeres realizar sus actividades de manera independiente financieramente, especialmente en la propiedad de la tierra.
Chieftainess Mkanda, líder tradicional de la mujer, de la gente habla chewa en el distrito de Chipata, dijo que el acceso a la tierra en su territorio estaba monopolizado por los hombres.
Pero ahora se ha dado a las mujeres una prioridad para que, incluso en los casos de muerte de sus cónyuges, puedan ser líderes a nivel familiar.
Chieftainess Mkanda dijo que se alentaba a las mujeres a poseer tierras para que estuvieran preparadas para ser líderes a varios niveles.
Los líderes tradicionales dijeron que todos tenían el derecho de poseer tierras en su territorio y que las mujeres podían ser propietarias, debido a su papel de liderazgo en las familias.
Explicó cómo a la mayoría de las mujeres se les dio poder en la tierra y, a diferencia de los viejos tiempos, esto les hizo ser valientes y guiar a otras sensibilizándolas sobre lo que podrían hacer si se les diera poder sobre la tierra.
De acuerdo con el Informe sobre el estado de género 2012-2014 del Ministerio de Género, las ofertas de tierras fueron 2,682 para los hombres, en comparación con 883 para las mujeres.
Además, dijo que hubo una disminución en el número de mujeres propietarias de tierras del 25.1 % en 2011 al 23.8 % en 2012, y un aumento en 2013 del 24.1 %.
Lo que significa que el acceso a la tierra tradicionalmente favorece a los hombres y solo unas pocas mujeres han tenido acceso a tierras consuetudinarias.
La situación se ve agravada por la escasa representación de las mujeres en el liderazgo y un alto nivel de ignorancia entre la población local.
Una solución a esta situación difícil es fortalecer la posición de las mujeres en sus comunidades y afianzar su liderazgo, garantizando su igualdad de acceso a los derechos, la propiedad y la toma de decisiones. Que las mujeres sean consideradas como impulsoras del desarrollo sostenible.
Si se les da el poder con la tierra, su rol de liderazgo podría llevar a cierta positividad en las áreas desde donde trabajan.
A pesar de la situación critica en el papel de liderazgo de las mujeres y su contribución a la agricultura, el desarrollo rural y la seguridad alimentaria están en desventaja.
Las crecientes presiones comerciales sobre la tierra aumentan la dependencia de la agricultura de subsistencia, y socavan aún más los derechos de las mujeres a la tierra.
Según el Informe sobre el estado mundial de la agricultura y la alimentación (SOFA) de la Organización de las Naciones Unidas para Agricultura (FAO), la evidencia de las desigualdades de género en el acceso a la tierra es abrumadora.
Las normas sociales discriminan a las mujeres, con prácticas tradicionales que restringen su capacidad para poseer o trabajar la tierra.
Durante la inauguración oficial de la Conferencia anual del Consejo Cristiano Femenino Presbiteriano en Lusaka (CMF) por la Iglesia Unida de Zambia (UCZ) en el Distrito Kafue, la Vicepresidenta Inonge Wina observó que la falta de tierra sigue siendo uno de los principales obstáculos para el empoderamiento de las mujeres.
La Sra. Wina dijo que el Gobierno estaba trabajando para abordar los desafíos y esperaba que las políticas positivas salieran del diálogo.
Dijo también que la falta de tierras tituladas, para la mayoría de las mujeres, sigue siendo un obstáculo para acceder al financiamiento de la vivienda.
La Sra. Wina pidió a todas las autoridades pertinentes garantizar que se realice la decisión de asignar el 30 % de las tierras estatales y tradicionales a las mujeres, lo que no se ha cumplido.
«Estoy, por lo tanto, instando a todos los departamentos gubernamentales pertinentes, responsables de la enajenación de tierras, para garantizar que estos procesos sean más fáciles para las personas«, dijo la Sra. Wina.
La Vicepresidenta explicó que era necesario detener la cultura de los Consejeros y los cuadros de Partidos que comparten la tierra entre ellos, para que se distribuya por igual entre todos los zambianos.
La Ley de Tierras de Zambia de 1995 es imparcial en cuanto al género y permite que todos tengan la capacidad de convertir tierras consuetudinarias en arrendamientos.
Petronnela Shiaka de Lusaka dijo que actualmente, no era fácil el liderazgo para las mujeres, tanto en áreas rurales como urbanas, ni tampoco que accedan a la tierra porque la propiedad todavía está dominada por los hombres. Y añadió: «Incluso cuando vayan al Ministerio de Tierras, encontrarán que el 90 % de los que poseen tierras son hombres en comparación con las mujeres«.
Shiaka explicó que aunque la Política Nacional de Género 2000 estipula que el 30 % de la distribución del Estado esté disponible para las mujeres, y que el 70 % restante se distribuya equitativamente entre hombres y mujeres pocas mujeres en el liderazgo tienen acceso a la tierra en este momento.
«En algunos casos, los gobernantes se distribuyen entre sí algunas tierras disponibles en Lusaka, pero cuando, por ejemplo, voy a buscar tierras, dirán que no hay tierra disponible en Lusaka«, y añadió que «era difícil acceder a la tierra en un área donde había negocios, porque preferirían dar tierras en un área donde saben que no hay oportunidad de negocio «.
Piensa que las mujeres deberían levantarse y luchar por sus derechos de propiedad y acceso a la tierra, porque hay documentación legal que establece que un porcentaje particular de la tierra debe darse a las mujeres.
La Ministro de Tierras, Jean Kapata, ordenó a los alcaldes ( councillors) dar el 50% de la tierra a las mujeres en un intento por impulsar el desarrollo inclusivo.
«Esto significa que si un consejo anuncia 1.000 parcelas, 500 de ellas se deben dar a las mujeres. Y vamos a contraatacar para garantizar el cumplimiento de esta directiva«.
La Sra. Kapata también dijo que se aseguraría de que las barreras para acceder a la tierra por parte de las mujeres fueran eliminadas para permitir que las mujeres posean este recurso natural de una manera total.
En cuanto al VIH, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha observado que los derechos de las mujeres a heredar bienes son un factor crucial para reducir su vulnerabilidad a la violencia y la discriminación.
Si bien los derechos de tierras y de propiedad de las mujeres son vitales para el desarrollo, la realidad es que en muchas partes del mundo estos derechos a menudo no se comparten equitativamente entre hombres y mujeres. Los Obstáculos para asegurarse esos derechos son complejos y a veces con contextos específicos. Van desde estándares inadecuados a las implementaciones de leyes, discriminaciones sociales, costumbres, actitudes y programas a niveles local regional y nacional que tomados juntos resultan en muchas discrepancias in el practica entre resultados de desarrollo para hombres y mujeres
Sin embargo, existen ejemplos prácticos que demuestran que, si se les da la oportunidad de acceder a la tierra, las mujeres pueden aprovecharla al máximo.
Y en cuanto a la sostenibilidad ambiental, las prácticas agrícolas de las mujeres suelen ser menos propensas a contribuir a la degradación ambiental y la pérdida de recursos naturales.
Sin un reconocimiento básico de la capacidad de las mujeres y el derecho a tomar decisiones fundamentales sobre sus vidas, las mujeres permanecerán relegadas a un lugar aparte de la sociedad.
Para que las mujeres líderes se conviertan en participantes activas y valiosas en la vida de sus comunidades, el derecho de cada mujer a la tierra y la propiedad debe ser respetado, protegido, cumplido y aplicado, y esto debe hacerse sobre la base de la igualdad con los hombres.
Los logros que se obtendrían elevarían a las mujeres al liderazgo, y familias enteras, comunidades y sociedades elevarían su nivel de vida.
Las mujeres lideres deben también garantizar los derechos a la tierra y mejorar la capacidad de diversificar sus medios de vida, planificar mejor su futuro, escapar del ciclo de pobreza que conduce a la exclusión social.
Zambia
Traducido de AllAfrica para AEFJN-Madrid